Sí, lo sabemos, es agotador seguir encontrando polvo en tu hogar cuando has acabado de limpiar. No te preocupes, con nuestros consejos te ayudaremos a controlar el polvo en tu hogar.
No hay nada peor que hacer una limpieza exhaustiva de la casa y cuando has acabado darte cuenta de que siguen apareciendo bolas de polvo. No importa cuánto limpies, parece que no puedas hacer nada por impedir que aparezcan. Además de ser antiestético, puede afectar a las personas con asma y alergias.
Aunque es imposible hacer desaparecer el polvo de cada habitación completamente podemos minimizar su impacto.
El polvo se forma por partículas que provienen de fibras, telas, tejidos y personas. Por, ello cuando las casas están vacías se ensucian menos.
Para minimizar el impacto del polvo en tu hogar, debes retirar cuantas más cosas mejor:
Organiza tus armarios
Tal y como hemos dicho, fibras, telas, tejidos y personas son los principales culpables de introducir polvo en tu casa. Lo que no vas a poder evitar es tener estos elementos alejados de tu casa, pero por lo menos, puedes mantener tus armarios ordenados y limpios. Esto te ayudará a evitar que se forme buena parte de polvo, escape y controlar el polvo en tu hogar.
Guarda la ropa que no te vayas a poner o que no es de temporada en contenedores o bolsas de plástico transparentes. Estos mantienen el polvo alejado y te siguen permitiendo ver qué es lo que guardan en su interior.
También debes limpiar los armarios de dos a tres veces al mes para controlar el polvo en tu hogar.
Mantén el suelo libre de cacharros
Cualquier cosa que dejes en el suelo será un imán para la suciedad.
La ropa de la habitación, los juguetes en el comedor, libros en el despacho y cualquier cosa que apiles en el suelo, tendrá un gran impacto en la cantidad de polvo que se genera en la casa.
Una limpieza rápida de todas las cosas amontonadas no ayudará mucho. Lo que necesitas es ordenar y retirar las cosas del suelo, para que el polvo no pase al aire y del aire a tus pulmones y los de tu familia. Además, de esta manera, conseguirás pasar el aspirador mucho más fácilmente.
Minimiza el uso de alfombras
Sabemos que las alfombras son muy bonitas y acogedoras, sin embargo, atraen mucho el polvo. Incluso si pasas cada día el aspirador, las personas con asma o alergia seguirán pasándolo mal.
Si aún así quieres seguir usando tus alfombras, la mejor opción es usar aspiradoras con filtración HEPA, suelen ser mejores porque usan tecnología de succión ciclónica que evita que el polvo vuele en el aire. En el caso de no ser alérgico, puedes probar con uno que tenga buen cepillo, pero tendrás que aspirar por lo menos dos veces por semana para mantenerlas en buen estado.
Cambia las sábanas al menos una vez por semana
Las sábanas y almohadas son los lugares favoritos del polvo. Como hemos dicho antes, las personas son productoras de polvo, y más concretamente las células muertas de la piel. Mientras duermes, las capas de la piel exterior se desprenden y acumulan en la ropa de cama. Eso combinado con las fibras de la ropa de cama, acaba generando polvo.
Por tanto, debes lavar las sábanas y fundas al menos una vez por semana y usar una cubierta antialérgenos en el colchón.
Asea regularmente a tus mascotas
También las mascotas desprenden células muertas de su piel. A parte de ello, suelen desprender más cantidad de pelo que los humanos, que es también otra importante fuente de polvo.
Su aseo regular, es esencial para evitar que la piel muerta y el pelo de las mascotas se acumulen.
En el caso de que tengas gatos, también deberías mantener su caja de arena cubierta, porque también puede generar mucho polvo.
Limpia antes los puntos altos que los puntos bajos
Para limpiar el polvo de una manera correcta debes empezar por los puntos más altos e ir descendiendo.
Comienza desde la parte superior de mesas, armarios, escritorios, estanterías, ventanas y todo lo demás y avanza gradualmente a los espacios más bajos hasta finalmente limpiar el suelo.
Mientras desempolvas los puntos más altos, empuja conscientemente el polvo hacia abajo y así poder recogerlo con la aspiradora.
Compra las herramientas adecuadas para eliminar el polvo
La clave para capturar el polvo, son los paños de microfibra, funcionan mucho mejor que cualquier trapo de algodón.
No utilices el plumero para limpiar los puntos más altos de la habitación, lo único que hacen es agravar el polvo y sólo viajará a otro lugar.
En el caso de que te veas tentado a usar plumero en alguna superficie, intenta que sea de avestruz porque atrapan el polvo mejor que otros tipos de plumas.
Como hemos mencionado en el punto tres, utiliza un aspirador potente para controlar el polvo en tu hogar.
Aspira los muebles tapizados
No te olvides de limpiar sobre los sofás, sillas y taburetes. Usar una aspiradora para eliminar el polvo y los alérgenos de los muebles marcará una gran diferencia.
Ve a la caza de bolas de polvo
Las bolas de polvo son pequeños grupos de polvo que se forman y esconden en las zonas menos esperadas de tu hogar. Estos pueden ser:
-Debajo de muebles bajos
-Detrás de la TV, donde se encuentran los cables
-Debajo o detrás de electrodomésticos
-En los rincones de las habitaciones
-En los pliegues de cortinas y lámparas
Consigue un purificador de aire
Las partículas de polvo flotan por el aire hasta que encuentran un lugar para asentarse. Los purificadores de aire absorben muchas partículas y de esta manera reducen la acumulación de polvo en superficies.
Hoy en día, los purificadores de aire vienen en todas las formas, tamaños y diseños. Absorben humo, caspa, piel muerta y moho. Recomendamos que los coloquéis en las habitaciones más utilizadas.
De todas maneras, el polvo no desaparecerá por completo y deberéis seguir limpiando. Aunque seguro que ayudan a mantener un ambiente más saludable.
La mejor manera de mantener una casa limpia y saludable es contar con profesionales de la limpieza. En Perlimp sabemos de lo que hablamos…. Si quieres más información no dudes en contactarnos.